El pasado mes de diciembre, el Gobierno aprobada la remisión a las Cortes del Proyecto de Ley de Fomento del Ecosistema de las Empresas Emergentes, más conocido como Ley de Startups, cuyo objetivo es favorecer el emprendimiento innovador y la atracción de inversión y talento internacional.
La aprobación definitiva de la nueva normativa está prevista para antes de que finalice el año. Un acontecimiento de carácter prácticamente inmediato que invita a analizar su verdadero alcance. ¿Conseguirá materializar la atracción inversora que proclama y allanará el camino hacia una nueva economía digital? ¿Supondrá el empuje necesario que posicione definitivamente a España en el ecosistema emprendedor? ¿Conseguirá atraer el talento internacional y actuará como efecto llamada y el establecimiento en España de los llamados nómadas digitales? Los expertos se muestran optimistas ante el devenir de una normativa ampliamente esperada.
Objetivos de la Ley de Startups
La Ley de Startups, englobada en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que pretende cambiar la estructura productiva española, tiene como objetivo favorecer el emprendimiento innovador a través de la simplificación de los trámites para la creación de nuevas empresas y el establecimiento de incentivos para impulsar la movilidad internacional de emprendedores y profesionales de alta cualificación.
Para ello incluye destacadas medidas fiscales, la eliminación de trabas burocráticas, y la flexibilización de los trámites que impulsen la creación de empresas emergentes, principalmente de base tecnológica. En este sentido, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, lleva tiempo asegurando que la nueva normativa va a situar a España entre los países con mayor atractivo para la creación de startups, al tiempo que será clave en la atracción de inversión y talento.
Las empresas a las que se refiere la nueva regulación son las que constituyen la base de la nueva economía digital y que se apoyarán en la normativa para superar las dificultades que presentaban sistemáticamente, al menos en sus fases iniciales, como la falta de financiación y la necesidad de captación y retención de trabajadores altamente cualificados.
Además, con la nueva Ley de Startups se pretende atraer a los llamados nómadas digitales, teletrabajadores que se desplazan a territorio español y que, con el nuevo marco regulatorio, encontrarán un procedimiento más ágil y sencillo para obtener el visado y la residencia, así como un régimen tributario especial que les incentivará para permanecer en España. El objetivo final es encaminarse hacia una nueva economía digital y alinearse con los países que resultan más atractivos en la atracción de talento.
Ventajas de la nueva normativa
La Asociación de Startups ya ha reconocido que la Ley de Startups es un paso muy importante para el reconocimiento de la startup como modelo empresarial, al tiempo que se muestra satisfecha de los avances que supone, especialmente teniendo en cuenta los obstáculos administrativos y legales que existían en la creación de estas empresas.
Así, la Ley de Fomento del Ecosistema de las Empresas Emergentes incorpora una serie de medidas orientadas a incentivar la creación de este tipo de empresas, como la reducción del tipo del Impuesto de Sociedades del 25 al 15% hasta un máximo de cuatro años. Además, se agilizarán los trámites para la constitución de las empresas, con un solo paso telemático que supone la eliminación de diferentes costes.
Entre otras medidas, se permitirá el aplazamiento de la deuda tributaria sin garantías ni intereses de demora, y se elevará la base máxima de deducción por inversión en empresas de reciente creación hasta 1000.000 euros anuales.
En ocasiones, las startups poseen ciertas características que difieren de las que caracterizan a otro tipo de compañías, como sueldos según la productividad, flexibilidad horaria y la deslocalización. Con esta nueva normativa se favorece la movilidad internacional, incentivando el visado para nómadas digitales que permitirá a los teletrabajadores vivir y trabajar legalmente en España.
Para conseguir el establecimiento de los nómadas digitales, el nuevo marco regulatorio establece que tendrán la posibilidad de residir y trabajar en España durante cinco años, acogiéndose a un régimen tributario especial y tributando por el impuesto sobre la renta de no residentes.
Una gran oportunidad
Todo parece indicar que la Ley de Startups hará que España se sitúe en el foco de creación de este tipo de empresas, que brindarán oportunidades a jóvenes con talento. También se convertirá en un país atractivo para atraer a trabajadores cualificados, en una clara apuesta por la economía digital.
Con unos niveles desempleo superiores a lo deseado por el marco europeo y un futuro lleno de incertidumbres, el objetivo último de todas las medidas mencionadas está claro: impulsar el ecosistema empresarial y emprendedor, atraer esfuerzo inversor en proyectos innovadores ligados a la economía digital, y repatriar talento nacional y atraer talento internacional, lo que sin duda puede ser una magnífica oportunidad para nuestro país.
Ante la aprobación inmediata de la Ley de Startups se hace cada vez más necesario para estas empresas un adecuado asesoramiento que les permita conocer el auténtico alcance del marco normativo que marcará el sendero del emprendimiento innovador en los próximos años. Compañías, emprendedores y nómadas digitales comienzan a buscar el apoyo en especialistas que pueden orientarles en función de las necesidades de su proyecto y planificar rigurosamente el desembarco de su esfuerzo y talento en nuestro país.
